Antes de hacerles una crónica del taller del día de ayer, tengo que mostrarles el trabajo terminado de Luisa.
Ella asistió, también, al taller que realicé el sábado pasado en la tienda Calicó, el proyecto era un almohadón, pero es tan creativa que ayer me sorprendió con este precioso bolso.
Fue una transformación preciosa, de almohadón a bolso,
utilizó todas las telas del kit, sólo agregó la del forro.
Su cara de orgullo y satisfacción lo dice todo, la mía fue de sorpresa y agradecimiento. Me encantó Luisa.
Y ahora vamos a Muros de Nalón . . .
El día empezó con todo un temporal muy asturiano, mucho viento, frío y bastante lluvia. En los caminos había pequeñas ramas, hojas y todo lo que caía de los árboles cercanos.
La verdad es que estaba horrible para salir de casa pero a su vez era el día ideal para reunirse
con amigas en una linda y cálida casa a coser.
Las casas rurales del Coto del Pomar son preciosas,
en invierno o verano, con sol o mal tiempo se puede disfrutar a pleno de ellas y del paisaje que las rodea.
La lluvia sólo daba pequeños respiros, así que la vista desde las ventanas era casi constantemente esta
Éramos muchas, ninguna vino sola, se acompañaron con compañeras de clase, hermanas, amigas o vecinas y entre todas se formó un gran grupo de amigas que llegaron dispuestas sobretodo a pasar una tarde diferente y divertida,
el proyecto creo que sólo fue la excusa.
Vinieron de Langreo, Oviedo, Piedras Blancas, Avilés, Pola de Siero, Luanco, de Muros de Nalón ( las que casi llegaron caminando) y hasta de Inglaterra, jajajaja.
Lamento que más de una haya tenido que cancelar su viaje por culpa del mal tiempo, pero habrá más talleres muy pronto.
Luego de los saludos y de quitarnos el frío del cuerpo
empezamos a ocupar lugares,
Hubo momentos de concentración, creo que fueron los menos,
momentos de acercarse a la ventana buscando luz natural, paisaje y relax.
En unas mesas arreglaban el país o el pueblo,
en otras estaban preocupadas por " Pipi y Miriam",
otras más pícaras recordaban a "Grey" y
otras solo cosían y avanzaban más rápidamente en sus trabajos.
Ahora, mirando las fotos como uds., veo que todas parecen muy formales y aplicadas,
pero créanme, no fueron así todo el tiempo,
las fotos no reflejan todo . . .
De repente las mesas quedaron vacías, en el salón no había nadie . . .
¿ pero dónde están todas ?
¿ pero dónde están todas ?
Un riquísimo olor a café llegaba desde la cocina. Carmen nos estaba preparando con todo lujo de detalles la esperada merienda.
El Café Bar Muros nos deleito con los dulces,
unos cupcakes de manzana
y un bizcocho "Nevado" con frutos secos y rojos,
mmmm, ¡que bueno todo !
Así que acá estaban (estábamos) todas.
Divirtiéndonos sacándonos fotos, charlando,
con algún momento tierno,
y conociéndonos todas un poquito más.
En estas fotos finales falta alguna que salió disparada,
con miedo de llegar tarde a su cita romántica.
Hemos hecho honor al viejo refrán,
y hoy más que nunca en su sentido más amplio:
" Al mal tiempo buena cara",
y las nuestras terminaron la tarde-noche muy sonrientes.
Con trabajos casi terminado y otros no tanto.
Algunas con cosas aprendidas y otras recordadas.
Con la vista cansada y otras con apenas voz (como yo).
Pero creo que todas por unas horas nos olvidamos del mundo,
de penas y problemas,
de penas y problemas,
nos relacionamos con gente diferente,
compartimos y nos reímos juntas,
y por supuesto nuestra afición al patchwork
fue el punto de encuentro.
Gracias a Carmen,
por tomarse tanto trabajo en preparar todo y
por preocuparse de lo que nos hiciera falta
para estar todas lo más cómodas posible.
para estar todas lo más cómodas posible.
Gracias al Café Bar Muros,
por los ricos dulces que nos acercaron.
y por supuesto,
gracias a todas las que asistieron,
sin cada una de uds. no hubiera sido posible.
Hoy tenemos un día sin agua (por el momento) donde el sol está tratando tímidamente de asomarse,
así que empecemos con optimismo el domingo y la semana, porque nunca olvidemos que
" Por muy larga que sea la tormenta,
el sol vuelve a brillar entre las nubes" ( Kalil Gibrán)